Según los expertos en la materia, es muy importante que las técnicas de creatividad se apliquen en grupos que no sean muy grandes (aconsejan entre 6 y 10 personas), ya que sino la participación de todos puede que no sea posible. Así que, teniendo eso en cuenta, y debido a la afluencia de gente (30 personas aproximadamente), decidimos dividirlos en 3 grupos.
Así que ¡manos a la obra! Dividirlos en grupos, pero ¿cómo? ¿es aconsejable que se conozcan?¿que no se conozcan? En nuestro caso había gente que venía en grupos y otros individualmente, por lo que decidimos dividirlos intentando que dichos grupos no estuviesen juntos, así no habría gente que se sentiría "sola". Para ello, utilizamos post-it de colores, a cada participante se le dio uno y según el color fueron formados los grupos. Creemos que funcionó y, además, la gente fue muy abierta y no hubo problema alguno.
Una vez formados los grupos, cada uno tenía un sitio diferente para llevar a cabo la práctica así que ¡todos a sus puestos!
Y comienza la acción... Primero un poco de entrenamiento para nuestras mentes, algo fácil y sencillo para calentar motores y crear un ambiente distendido. Cada grupo tenía una pregunta a la que contestar:
- ¿Qué es lo más arriesgado que has hecho nunca?
- ¿Qué es lo más divertido que has hecho nunca?
- ¿Qué es lo más llamativo que has hecho nunca?
Teniendo en cuenta las preguntas, podéis imaginar que las respuestas fueron de lo más variopintas, pero primer objetivo cumplido: hacer trabajar a nuestra mente y pasar un rato de risas.
Ainara, Iraia y Nahikari
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